EL CONDE DE MONTECRISTO (1844)
ALEJANDRO DUMAS
El 24 de febrero de 1815, fui injustamente encarcelado. Je m’appelle Edmond Dantès y tuve que escarbar la tierra con mis manos para evadirme. Atravesé mares, conquisté tesoros, me convertí en conde. Amé y perdoné, comme vous, como aman y perdonan las personas, mais sólo me siento libre quand vous, mon cheri lecteur, me ayudas a escapar. ¡Sólo me queda confiar y esperar a que te detengas delante de este libro y lo abras! ¡Confiar y esperar!
Ernesto Ortega Garrido
latoalladelboxeador.blogspot.com.es/
¡Fantástico!
ResponderEliminarEs increíble cómo se puede contar toda la novela en tan pocas palabras.
Mi aplausos para Ernesto.
Me encanta pero veo un par de errores a subsanar o bien, estoy equivocada y hay que subsanarme a mi.
ResponderEliminarHay un "mais" a escribir en cursiva.
Y... "esperar a que te detengas", falta el "te"
Por todo lo demás, me suena me suena y me gusta
Oído, cocina.
EliminarAllá vamos. Muchas gracias, Luisa (todos somos bibiotecarios)
Besotes